viernes, 30 de noviembre de 2018

Panteras

Hombres piedra, hombres lastre. 
A todos aquellos que aparentaron poder traernos el viento y acabaron enterrándonos en el más allá del cielo. 

Hombres fango, hombres sombra. 
Al ejército de soldados que jugaron a indios, a vaqueros. Los que tiraban los dados para ir de oca a oca y tiro en la nuca porque me toca. 

Hombres roca, hombres hielo. 
A las enredaderas del verso, a los que nunca alcanzábamos por más que corriéramos. 

Hombres miedo, hombres llanto. 
Aquellos que nos obligaron a ser salvajes, fieras, dueñas de nuestro destierro; recogiendo restos, prendiendo el fuego.

Querer morirnos del todo y aprender que bastaba con amar la parte de nosotras que más muerta estaba. 

2 comentarios:

Bubo dijo...

Y a veces, pocas veces, todos los hombres en el mismo.

Nebroa dijo...

Y yo lo conozco